Cuando la noche llega a los bosques, el clima húmedo y la presencia de mosquitos son interrumpidos por pequeños brillos fluorescentes que bailan en la oscuridad… y no, no son luciérnagas ni seres de otro planeta.
Trabajadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina se dedicaron a investigar qué estaba pasando. Rascaron en la tierra, se asomaron a los huecos de los árboles; pero las luces se movían, saltaban como locas.
Después de muchos raspones, de correr patinando por el lodo, lograron capturar a uno de estos colores, descubriendo que se trataba de una rana, identificada como Rana Puntuada, o Hypsiboas punctatus, un anfibio que tiene la capacidad de brillar en la oscuridad por las glándulas que producen, además, usan el color fluorescente para atraer a su pareja: cantan y alumbran las noches más oscuras.
¡Quiero saber más!
La sorpresa de la rana que brilla – Página 12