Mariana nos cuenta el secreto de los jaguares 

Mariana Valeria Ayala Rubio escribe el libro para la primera infancia, en el que cuenta cómo este animal recorre la sierra sinaloense.

Por: Azucena Manjarrez

Mariana Valeria Ayala Rubio, una bióloga y mediadora de lectura, que trabaja en proyectos de conservación del jaguar y su hábitat, escribió el libro para la primera infancia El secreto de los jaguares, donde narra cómo los biólogos salen a campo y toman fotos del felino Panthera onca, y también como es que este animal recorre la sierra sinaloense. 

Explicó que es un libro – manual que se cuenta en dos formatos “…por la necesidad de abordar el tema con los más pequeños. Tengo algunos años trabajando con talleres de educación ambiental y uno de mis intereses es divulgar la ciencia con primera infancia”; cuando salía a dar estos talleres, le era más complicado abordar el tema con esta población.

La obra primero es un texto con una serie de pasos que invita a los niños y niñas a que jueguen a ser biólogos que van a campo y puedan encontrar su propio felino. También es un cuento narrado en audio al que se accede a través de un QR plasmado en el libro, esta segunda parte está inspirada en el trabajo de la bióloga Yamel Rubio, quien empezó a rastrear la sierra sinaloense en busca del felino y comenzó el arduo trabajo de investigación y conservación del jaguar en el estado de Sinaloa.

Para Mariana Valeria fue toda una aventura hacerlo. Estar en los proyectos de conservación del jaguar en el municipio de San Ignacio y acompañar a la bióloga Yamel Rubio, así como el convivir con el equipo de trabajo en todo este proceso, la incentivó a escribirlo y verlo ahora publicado por Amonite es algo que no imaginó.

Nunca pensó en ello, pero como amante de libros necesitaba uno que le ayudara a trabajar con los infantes. “Pensé primero en hacer un manual explicando cómo funcionan el foto trampeo con animales, que es un método cero invasivo, pero después surgió este híbrido: manual y cuento”.

Tras las huellas del jaguar

En el libro ilustrado por Chopernawers, se muestran los 10 pasos para salir a campo y buscar al jaguar, entre ellos que el biólogo o la bióloga tenga lista su mochila con artículos de primera necesidad, contar con un mapa, no dejar de caminar hasta al encontrar rastros y colocar sobre un árbol la cámara trampa. Ahí deberá permanecer prendida durante aproximadamente 30 días: “Todo esto yo quería enseñárselo a los niños de hasta seis años, que es donde llega la primera infancia. No encontraba libros que me sirvieran del todo para explicar el trabajo de campo y me puse a trabajar durante algunos años para lograrlo. Me siento muy contenta con este libro”.

Otra de las necesidades de la bióloga y autora, es que “… interesaba también que se supiera que en Sinaloa hay jaguares, porque hasta la fecha hay gente a la que se le sigue haciendo increíble que existan. Hay una necesidad de contarlo”. 

Fue en el año 2017 cuando se sumó al equipo de estudio del jaguar; haciendo trabajo de campo, elaborando talleres de educación ambiental y concientización y proyectos culturales en el Museo del Jaguar que se encuentra en la comunidad de Cabazán, y la Estación Biológica del Jaguar en la comunidad de El Carmen, ambas en San Ignacio, las cuales forman parte del Corredor Biocultural del Jaguar, lo cual le valió para poder formar parte de la Alianza Nacional para la Conservación del Jaguar.

Una de sus apuestas con este trabajo también es cambiar la idea contemporánea que se tiene del jaguar, que parte de miedo y no de esa figura venerada y respetada desde tiempos remotos.

“Me gustaría mucho que se le vuelva a valorar como parte importante del patrimonio biocultural de México, por eso pensamos en ilustrar con la imagen de un jaguar noble, que no es rudo, ni agresivo. En las distintas regiones cambia la visión que se tiene sobre él, en San Ignacio, al principio se tenía esa idea de miedo, temor, pero hoy es algo de lo que se sienten orgullosos y le dan un gran valor”.

El mundo de las letras 

Hace 14 años que Mariana se adentró al mundo de la mediación de la lectura, en el Programa Nacional de Salas de Lectura y desde hace 6 años creó el proyecto Arrullos de Papel, lectura y ciencia para primera infancia. Más que escritora, se considera que es lectora. Desde niña vivió rodeada de libros y sus padres le contaban historias, aunque no pensó en estudiar letras, tomó el camino de la biología, pero nunca se separó de los libros.

“Me llenaba mucho el tema de la biología, pero nunca dejé de hacer mediación lectura, buscaba libros de divulgación, textos de ciencia y los empecé a combinar con los de literatura y a compartirlos”, detalló.

“Con este libro busqué hacer divulgación de la ciencia. Siento que a veces las primeras infancias están relegadas y se piensa que estos temas no son para ellos. Quiero que sean tomados en cuenta de la misma manera, abrir la visión de que son personas que piensan por sí solos y tienen autonomía aún siendo pequeños”.

Este libro, mencionó, significa un paso más en su labor como divulgadora de la ciencia y mediadora de lectura. Esto la invita a seguir pensando en publicar más libros de divulgación científica para primera infancia. 

La autora contó que lo interesante en el desarrollo de esta historia, fue compartir un poco del lenguaje científico, con los términos usados: “Me sentí muy cómoda escribiendo, aunque es mi primer libro, ya tenía varios textos con los que he trabajado en los talleres que imparto, pero no los había pensado publicar. Esto es una parte muy  personal”.

Siempre he tenido claro que con la literatura se puede jugar. De niña recuerdo disfrutar de leer como si fuera cualquier otro juego y apuesto a ese momento de este disfrute. Cuando estoy con los niños trabajando, también estoy imaginando al adulto acompañante como uno los primeros maestros en el camino de la lectura”.

El secreto de los jaguares, lo pensó como un libro para que cualquier infante se pueda sentir acompañado, que juegue e imagine la sierra sinaloense de donde emerge el felino de imponente fisionomía.

Mariana Valeria Ayala Rubio.

Culiacán, Sinaloa 1994. Bióloga con acentuación en Ecología y Medio ambiente por la Universidad Autónoma de Sinaloa. Mediadora Profesional de Lectura por la Secretaría de Cultura y Universidad Autónoma Metropolitana. Docente de asignatura en la Facultad de Biología UAS y maquetadora de la Revista Acta Biológica Mexicana. Integrante del Sistema Sinaloense de Investigadores(as) y Tecnólogos(as) (SSIT) 2024-2026 como Tecnóloga. Maestrante en el Posgrado de Ciencias Biológicas. Es Promotora de Lectura del programa Red de Lectores Sinaloa del Instituto Sinaloense de Cultura. Colaboró en el proyecto PRONACES 319127 y forma parte de diversas organizaciones sociales donde funge como educadora ambiental y gestora cultural. Creadora de Arrullos de Papel y Seewa festival para la primera infancia.